El cuidado de la salud de los trabajadores siempre ha sido un tema controversial de atención para las empresas, mayormente porque aún no han comprendido todos los beneficios que tiene para la organización contar con un talento humano física y psicológicamente saludable, lo cual implica un reto mayor implementar programas de salud ocupacional en la situación actual de contingencia sanitaria por COVID-19 en la que nos encontramos.
La salud ocupacional contempla una serie de intervenciones dentro de las organizaciones para promover y cuidar la salud de los trabajadores, prevenir accidentes y enfermedades, eliminar factores de riesgo en el trabajo y fomentar el trabajo seguro, con la finalidad de aumentar el bienestar físico, psicológico y social del talento humano.
Si bien la salud ocupacional trata de proteger la salud de los trabajadores atendiendo los factores de riesgo propios de cada actividad laboral y giro comercial, hoy en día también debe contemplar al COVID-19 como un factor que pone el riesgo la salud de los trabajadores.
Ya no basta con atender las disposiciones generales sobre seguridad laboral referentes a los lineamientos sobre construcción, prevención de incendios, trabajo en alturas, manejo de maquinarias, almacenamiento de materiales y sustancias peligrosas, a la electricidad estática… o bien aquellas disposiciones relacionadas con el cuidado de la salud como el ruido, iluminación, radiación, agentes químicos y biológicos, factores de riesgo ergonómicos o psicosociales. Ahora también es indispensable considerar las medidas y protocolos necesarios para evitar la propagación de COVID-19 dentro de la empresa, al mismo tiempo que se siguen cumpliendo las normas regulares de seguridad y salud en el trabajo.
Por eso, las empresas tienen la responsabilidad de implementar las medidas pertinentes para minimizar el riesgo de contagio del nuevo virus en todas sus áreas de trabajo.
En ese sentido, hoy más que nunca es fundamental que las empresas cuenten con un sistema de seguridad y salud en el trabajo eficiente que se encargue de evaluar las condiciones en las cuales se lleva a cabo el trabajo para diseñar planes de intervención encaminados a promover acciones que informen y enseñen a los trabajadores sobre cómo pueden cuidar su salud mientras cumplen con las actividades de su jornada laboral durante la pandemia.
En tu centro de trabajo… ¿Se orienta y capacita sobre las prácticas de higiene para evitar contagios de COVID-19? ¿Se implementan y respetan medidas de sana distancia? ¿Se delimitan áreas de entrada y salida para el control del ingreso-egreso de personas? ¿Se realiza una sanitización y mantenimiento permanente? ¿Se proporciona a los trabajadores equipos de protección personal? ¿Se cuenta con un responsable de vigilar el cumplimiento de todas las medidas de prevención de contagios por COVID-19?
Lo anterior no solamente está en función de cumplir con las normativas Federales vigentes, también ayuda a que los trabajadores se sientan cuidados y valorados por la organización… ¿a quién no le gustaría trabajar en una empresa que cuida a sus trabajadores? ¿Quién no pondría de su parte para permanecer en una empresa que lo está cuidando? Los trabajadores necesitan sentirse protegidos por su organización hoy más que nunca.
Además, se debe tener en cuenta que también se requiere la elaboración o el ajuste de las políticas internas en cada organización para asegurar que se cumplan los principios, compromisos, responsabilidades, obligaciones y acciones concretas, en materia de seguridad y salud en el trabajo, con la finalidad de que sustenten las bases para una cultura organizacional saludable durante y posterior a la pandemia.
Por último, es importante señalar que todas las empresas tienen ciertos retos que vencer cuando se trata de la prevención de factores de riesgo y de la promoción de la salud y seguridad en el trabajo, pero pareciera ser que aquellos principales desafíos giran en torno a la sensibilización de la alta gerencia sobre la importancia y los beneficios que tiene el cuidado de la salud y la seguridad en el trabajo para el talento humano, así como para el fortalecimiento, crecimiento y desarrollo de toda la organización durante y posterior la pandemia por COVID-19.
¡Hoy más que nunca se necesita de la salud ocupacional!
Psic. Gerardo Franco