Una desventaja del frenético mundo del multitasking en el que vivimos y creemos, es que algunas veces los líderes se cargan de múltiples tareas al mismo tiempo, teniendo la idea de que un líder necesita realizar muchas tareas por igual o al menos “más de dos tareas al mismo tiempo”, llegando a una sensación de “no hacer ninguna” por que muchas veces no logran terminarlas por completo o no cómo esperarían.
Así como lo lees, la multitarea ha sido la mentira más grande que nos han inculcado hoy en día.
Piensa en las computadoras: ellas ejecutan muchas funciones utilizando un solo recurso, el procesador.
Ahora te lo explicare un ejemplo sencillo: Cuando utilizas las herramientas de Word o Excel tienes dos ventanas abiertas al mismo, sin embargo, no puedes trabajar en ellas al mismo tiempo porque primero tienes que estar en una ventana y luego en la otra.
Esto pasa exactamente lo mismo con nosotros: Somos capaces de hacer dos cosas o más a la vez, pero no podemos centrarnos eficazmente en dos cosas al mismo tiempo.
Por eso la famosa frase de algunos líderes: “Es que no tengo el tiempo de realizar varias cosas a la vez”.
De hecho, muchas veces necesitas darte un tiempo para iniciar una nueva tarea y para reanudar aquellas que has abandonado, y no hay garantías de que la retomes en el punto exacto en el que la dejaste.
Y, cuando sentimos que nos hace falta el tiempo, puede ser que como líder tomes malas decisiones o que sufras un estrés innecesario por querer realizar varias tareas y concentrarte por igual en todas al mismo tiempo.
Recuerda que la gente con la que convives y trabajas a diario merece tu atención. Cuando le prestas una atención fragmentada, le dedicas tiempos pequeños e interrumpidos y saltas de una actividad a otra, el costo de estas interrupciones será mayor que el simple tiempo perdido. Probablemente acabes también perjudicando tus relaciones con tu equipo de trabajo.
¿Cómo puedes resolverlo?
Simplificando y priorizando.
Simplificar es ignorar todo aquello que podrías hacer y dedicarte a aquello que debes hacer. Consiste en reconocer que no todas las cosas importan por igual y en encontrar aquello que más importa para tus objetivos como líder o para tu equipo de trabajo. Se basa en darse cuenta de que obtener un resultado extraordinario viene determinado directamente por cuánto seamos capaces de reducir el objeto de nuestra atención.
La mejor manera de sacarle el máximo provecho al trabajo y a la vida es estrechar el foco de atención al máximo, cuando la mayoría de la gente piensa lo contrario.
Al no ser conscientes de que el éxito de verdad llega cuando hacemos bien unas pocas cosas, se pierden tratando de hacer demasiadas y al final puedes conseguir muy poco.
Como líder, no puedes tragarte la mentira de que es bueno tratar de hacer dos cosas a la vez. Aunque a veces se puede practicar la multitarea, nunca se puede hacerlo con eficacia.
“Hacer dos cosas a la vez, es no hacer ninguna”
M.P.A.D.O. Fernando José Ordóñez Ricalde.
Socio-fundador CODI Consultoría.